Texto – Redacción-Hearst. Fotos – Hearst.
En el número de febrero de Harper´s Bazaar, que ya se encuentra en los kioscos, Maxi Iglesias y Stephanie Cayo posan por primera vez juntos. Se conocieron durante el rodaje de la película “Hasta que nos volvamos a encontrar” una historia de amor de dos personajes que salían de su zona de confort y que se desarrollaba en los enclaves más emblemáticos y desconocidos de Perú. Maxi se encontró con una compañera de reparto con la que conectó de manera más allá de lo habitual.

Ella es Stephanie Cayo, actriz, bailarina, cantante… una mujer muy conocida en toda América pero prácticamente desconocida en España que desde el primer momento hizo todo lo posible porque Maxi se sintiera cómodo: «Era algo raro porque era la única persona del equipo que venía de fuera, estaba allí solo con su guion y sus ganas en un país desconocido para él, y siempre quise darle la confianza de que pudiera decirme lo que quisiera, partiendo de la base de que a mí no me gusta que me digan lo que tengo que hacer. Pero si no sientes equipo, te sientes fuera, es imposible que las cosas fluyan» señala Stephanie.

La buena amistad que se forjó entre los dos fue casi instantánea, aunque el hecho de que desembocara en algo más no fue algo que les tuviera confundidos en ningún momento. «A mí eso no me ha pasado nunca –dice Stephanie–, porque por más bonita que sea la historia, Maxi es un buen actor que está trabajando, y yo también. Fíjate que te diría que no sé qué tanto tuvo que ver la película».
«Nos fuimos conociendo de una manera, y hoy en día lo seguimos haciendo, pero de otra –cuenta Maxi–. El tiempo fue colocando cosas al margen del trabajo, porque yo terminé ese rodaje con una buena compañera que, además, me parecía buena persona. Me he enamorado en la ficción muchas veces, pero a lo mejor después del trabajo no me ha apetecido compartir mucho más. Se termina la jornada y se hacen planes de equipo, pero es cierto que en este caso a mí me apetecía, pero con ella». Stephanie refrenda sus palabras asegurando que, durante el rodaje: «fuimos muy amigos, buenos compañeros y nos fuimos conociendo. Y después del mismo… lo hicimos un poco más».

Por el momento, Stephanie se ha trasladado a vivir a Madrid donde, en breve, comienza un rodaje muy ambicioso y Maxi, consciente de la apuesta tan radical que ha hecho ella, afirma: «Todo lo que pueda ayudar y contribuir a que Stephanie desarrolle su carrera aquí me hará sentirme muy orgulloso”.
EXTRACTOS DE LA ENTREVISTA
- Stephanie: «Conocer a Maxi ha sido la sorpresa más grande que me ha pasado, quizá te diría que una de las cosas más inesperadas de mi vida».
- Stephanie: «Me encontré a alguien generoso, un tipo auténtico, claro y directo, que te dice las cosas como son. Y para rematar, tiene un corazón tan bonito y dulce como he visto pocos».
- Maxi: «Desde el principio vi a una chica a la que me apetecía escuchar, ayudar, con mucha vida a sus espaldas, y tan familiar y amiga de su gente como yo».
- Maxi: «Siempre he sido muy reservado con mi privacidad, quizá en buena parte porque he tenido parejas que no eran públicas, y evidentemente eso hay que respetarlo. Pero a partir de conocer a Stephanie se han dado una serie de circunstancias que han hecho que me dé igual: ella es actriz, ya se la conoce, no le importa…».
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