Texto – Albert Roca-Fotos Sergio Lardiez-Francisco Soler Oviedo.
El mes de octubre de este año 2019 se estrenará la esperada nueva película “Mientras dure la guerra” de Alejandro Amenábar, que habla del inicio de la Guerra Civil española a través de un punto de vista personal que emocionará al público. Dentro del extenso reparto podremos ver a la actriz Mireia Rey, que interpreta a Carmen Polo. Una actriz siempre motivada por nuevos proyectos, que disfruta en los rodajes y en todo el proceso de construcción de los personajes y que hemos visto en diferentes papeles episódicos en “Benvinguts a la familia”, “Centro Médico” “La Riera”… Así como en “La filla d’algú”, que tuvo un gran acogida en el Festival de Málaga.

Este pasado sábado participaste en “De Marsé a Mercè. Del Carmel al Guinardó”. Una ruta literaria y artística. ¿ Te gustan este tipo de propuestas?
Yo estudié cine y además de ser actriz me gusta escribir y el año pasado me propusieron una adaptación de Últimas tardes con Teresa, en la que además de llevar a cabo la creación de la propuesta actuaba. He tenido el impulso de crear y de explorar mi interior desde siempre. De alguna manera expresar mi propia lectura de la realidad para quizás comprendería un poco mejor. Quién sabe… Trato de equilibrar el trabajo de actriz con tener momentos para escribir pero no siempre lo consigo.

Has participado en “La filla d’algú”, que tuvo premio en Málaga, a la mejor actriz Aina Clotet en uno de los apartados del festival. ¿ Qué tal fue el rodaje?
Fue una cosa muy loca, de esas cosas en que te llama no sabes muy bien quién y te comenta que es para participar en una película de creación colectiva. Fui un día a rodar, pensaba que había acabado y al cabo de unos días descubro que tenía que volver para rodar. Sobre la marcha. Todo muy real-documental. Mi personaje es una enfermera. He hecho muchos perfiles profesionales. Siempre me interesa emular cómo se habla realmente cuando te dedicas a algo día tras día. Profesiones metódicas, por ejemplo. Ser un profesional pero también en lo cotidiano. ¿Qué implica? ¿Cómo te mueves? ¿Cómo te relacionas? Ser creíble en eso. No sé, me llama la atención.
Te vimos en otro festival, el de San Sebastián, con el corto ‘La octava dimensión’
Fueron 15 horas de rodaje, donde coincidí en la trama con un compañero al que conozco de haber trabajado con él anteriormente, Óscar Foronda. Así que salvada. El resto del equipo era genial, además. Y lo disfruté muchísimo. Fue cansado pero estuvo muy bien.

¿En general cómo vives los rodajes?
Muy bien. Me gusta mucho rodar. Estar ahí. Ver cómo trabaja la gente, hablar con la gente, estar con maquillaje y peluquería. Es un ambiente muy interesante en el que me encuentro cómoda. Muy diferente de cuando trabajo en casa y estás sola todo el día. El trabajo de mesa es necesario y está bien combinar, pero me gusta más esto, donde hay una conexión. En mi opinión es importante conectar con la gente y creo que es necesario vitalmente para darle humanidad a lo que estés haciendo. Además del aprendizaje que supone estar ahí, y probarte como actriz, jugar… Tú puedes pensar en los trabajos, o probarlos en casa pero el llevarlos a cabo con todos los elementos que constituyen rodaje… Eso no lo tienes siempre. Cada rodaje es un regalo. Es una oportunidad única para entrenarte.

Y hablando de rodajes, ¿cómo viviste el de “Mientras dure la guerra”, de Alejandro Amenábar?
Estaba rodeada de gente que trabaja mucho y muy bien. Yo iba en plan esponja. Me sentí muy arropada y respetada. Y no pasa siempre. Ha sido el proyecto en que me he sentido más acogida. Todo el mundo me cuidaba mucho. Yo misma me decía “esto no va a ser siempre así”. Fue un rodaje ideal, a todos los niveles.
¿ Y cómo llegaste al proyecto?
Me invitaron a un casting de un proyecto secreto donde sólo sabía el personaje, Carmen Polo. Y a partir de ahí empezó todo un proceso hasta que me llamaron, y supe que me iba a dirigir Amenábar. Me volví un poco loca. Ya que yo que estudié cine y Amenábar era mi ídolo “es mi ídolo”. Sentía una gran admiración por él, me parecía un genio y lo he podido constatar rodando con él. Verle trabajar es un privilegio. Con su manera de entender el cine, viendo como la película estaba en su cabeza. Impresionaba mucho. Fue muy amable conmigo y con toda la gente del rodaje.
Estuviste en la serie alemana la serie alemana Der Barcelona Krimi dirigida por el oscarizado Jochen Alexander Freydank (Toyland),
Cuando llegó la propuesta me pregunté: ¿Yo en una serie alemana? La verdad es que fue una de mis primeras oportunidades en algo de tanta magnitud así que muy agradecida con los directores de casting. Me propusieron el casting, y fue todo muy rápido. Me pasaron el guión de toda la serie y me lo leí el entero la noche de antes de la prueba y estuve con ello hasta la tantas. Así que fui a casting sin dormir mucho, la verdad, jeje Quería conocer el tono de la serie. En general fue una bonita experiencia, además de curiosa. Eso de hablar en un idioma y que te contesten en otro que no entiendes tiene su gracia…
¿ Y en Centro Médico?
Fueron dos papeles protagonistas episódicos independientes. Y fue todo muy interesante ya que en poco tiempo pasaban muchas cosas de golpe. Entrenarlo en la cámara y defenderlo dignamente es un entrenamiento muy importante. En 2 tomas tienes que estar ahí.
¿ Y sientes muchos nervios con los castings por si te van a escoger o no?
Los papeles no son tuyos hasta que has hecho el trabajo, y te diría más, casi hasta que se ha proyectado. Lo normal es que te digan que no, aunque ahora menos ya que hay una selección más concreta, y saben muy bien a quien eligen a los castings. Ahora estás más cerca del sí pero has de pensar que no. Cuando finalmente te llaman cuando te han cogido es una cosa prácticamente mágica, porque para que sea así se han de alinear muchos astros.

Y respecto a tus inicios hasta ahora, ¿en qué cosas has cambiado más?
En adaptarme. Juego más con cada género. Yo estaba obsesionada con la verdad, y siempre parto de mí misma. Me reconozco en todo lo que he hecho y siempre he aprendido alguna cosa nueva, pero ahora me atrevo a despegar más alto. A arriesgar.
Para finalizar, ¿tienes algún nuevo proyecto?
Tengo pendiente el rodaje de un corto con una directora australiana muy interesante y después de esto, ensayos de una obra de teatro en Girona, en el contexto de Sant Jordi. Se hace en la Catedral de Girona “La consueta”: Una versión de la leyenda de Sant Jordi, que es de carácter costumbrista. Es muy espectacular. Ya la hicimos el año pasado y fue muy bien.
Deja una respuesta