Nieves Concostrina: “No es agradable explicar las miserias que vives en casa”

Texto y Fotos Albert Roca. 

La periodista Nieves Concostrina, autora de libros como “Polvo eres” o “Menudas historias de la Historia”, presenta su primera novela “Antonia” –La esfera de los libros-, sobre la generación de «luchadores» que sobrevivió a la guerra y la posguerra.

La trama empieza el día de Reyes de 1930, cuando nació Antonia. La Juana tenía casi cuarenta años cuando trajo al mundo a su primera y única hija, una criatura tan rolliza como las coliflores que despachaba en el mercado madrileño de Santa Isabel. La autora refleja la vida de muchos españoles que no conocieron el bienestar hasta los años sesenta. Antonia es una mujer que pasó de tener la calle como única escuela a jugar en Bolsa a los setenta años.

-Preg. Cuando nació la novela?

El libro ya estaba allí durante mucho tiempo, pero no veía el momento. Tenia que tenerlo muy claro, y luego bien es cierto, que se me fue cruzando mi camino periodístico, y cambiando el plan inicial. El año pasado después de tener mucha documentación, de muchas charlas con el personaje real de Antonia la llevé adelante. Era la historia de “Antonia”, pero en realidad representa a millones de Antonias.

-Preg.Que nos puede decir respecto al título de la novela

Me parecía contundente, y no sabía si le iba a gustar a la editorial. Es redondo: empieza y acaba con “a”. Es un nombre que puede encerrar una vida. La vida de muchas valientes que lucharon contra la mierda que les tocó nacer, con un alfabetismo salvaje, pero eran listas con el hambre. Son Antonias que estan ahí, puedes cruzarte con ellas en cualquier momento.

-Preg. Hay una reivindicación entonces sobre el papel de la mujer

Decia un amigo que las guerras las hacían los hombres pero las sufren las mujeres, que sacaban los hijos adelante, y hacían los encajes de los bolillos.

–Preg. A través de la vida de Antonia vemos una mirada global sobre la crisis

Para personas como Antonia que han alcanzado la calidad de vida, su casita, su pensión, calefacción, cuando les dicen que ahora lo estan pasando mal, piensan que puede ser una broma. Piensa que como cito en el libro Antonia ha ido descalza por Madrid a 10 grados bajo cero, y comenta que ahora no hacia el frio que hacia antes, cuando había llegado a ir descalza por la calle. Si en esta crisis las calles no han salido ardiendo ha sido por las Antonias que han salido apañadas con 300 euros de pensión. Como no estan ardiendo las calles.

 -Preg. Antonia es una persona muy solidaria

Antonia hace su compra mensual y sale con una caja de alimentos que va al banco de alimentos. Ella forma parte del tejido social, acordándose del hambre que ha pasado y eso no lo puede soportar. No hay nada peor sensación que la del hambre: tener que tirarte al suelo a buscar un pedazo de pan y hacerte una bola en el cuello por el hambre que tienes. Es horrible. Pero no hay que olvidarlo, eso se ha vivido aquí.

-Preg. Antes ha comentado que Antonia representa a muchas Antonias, puede profundizarlo?

Te contesto haciéndote una pregunta: ¿Leyendo el libro has reconocido a alguien? Verdad que sí. Estan aquí… y no les hemos dicho GRACIAS. Yo no hubiera llegado hasta aquí si estas Antonias no se hubieran partido la cara. Jamás se han rendido y han luchado por el porvenir de sus hijos. Fijate que Antonia se empeña que su hija estudie el bachillerato, y le dicen que para qué. Y ella contesta que quiere que sea una mujer culta e instruida y que no le pisen el cuello como a ella, que es lo que trae el analfabetismo. Lucha y consigue el bachillerato.

-Preg. Son historias muy personales y duras

Mi madre me contaba, mi madre me decía, mi tia me decía… son historias que no salen de casa. No es agradable explicar las miserias que vives en casa… les cuesta decir que fueron estraperlistas, que tuvieron que abortar, que buscaban en los cubos de basura para poder comer.No lo cuentas porque te sientes miserable, una desgraciada o un desgraciado. Y en todas las casas se han vivido historias así, estan al orden del dia.

– Preg. Antonia tiene un presente muy feliz

Porque Antonia o las Antonias no abandonaron. Antonia a los 70 años le pasó por su cabeza estudiar bolsa. Es una mujer muy lista, ahora y en los peores momentos más. El hambre agudiza el ingenio y despeja el cerebro.