Meri Anglés: “Quiero que mi niña interior nunca se pierda”

Texto – Albert Roca. Fotografías – Albert Roca-Archivo-Meri Anglés. Entrevista realizada en el Hotel Me Barcelona.

Este viernes 5 de diciembre se estrena en Netflix “La Navidad en sus manos 2” dirigida por Joaquín Mazón, que nos hace sumergirnos de nuevo con el universo mágico de las Navidades con diferentes situaciones divertidas. La actriz Meri Anglés interpreta a uno de los personajes mágicos, el de Elfa.

¿Cómo llegaste a La Navidad en sus manos, ya en la primera parte?

Me encontraba en uno de esos momentos negativos donde creía que lo iba a dejar todo, pero que me quedaba el último cartucho, la última piedra, para continuar este sueño de la interpretación. Contacté con el director Joaquín Mazón, le envié mi videbook. Casualidades de la vida me dijo, «Justo hay un personaje que ahora mismo faltaba por concretar. ¿Quieres entrar tú?». Y dije, «Claro que sí. Este es mi momento”.  Me fui a vivir a Madrid, hicimos ensayos, luego rodamos la película y fue una experiencia maravillosa. Luego me llamaron de nuevo para rodar la segunda parte.

¿Cómo definirías a tu personaje?

Soy la elfa de Papá Noel y ayuda a que la Navidad sea posible.

¿Para interpretarlo te ayudó mucho el disfraz?

Muchísimo. No es lo mismo que yo vistiera como lo hago habitualmente que con el papel de elfa, que me transformó totalmente. Además, hubo un gran trabajo por parte de las chicas de maquillaje, el vestuario, la peluquería. Estaba completamente transformada.

¿Alguna anécdota que recuerdes?

Para que la magia no se perdiera, los juguetes que salían en la película eran de un tamaño enorme. Por ello la comida y los dulces también eran de un tamaño gigante. Y yo, rodeada de chuches, que me encantan, tenía una tentación muy grande de comerme una chuche de fresa. Y hubo un día que el director nos dijo: «Coged las chuches y coméroslas». Y allí estábamos comiendo las chuches de fresa y la regaliz.

¿Es una de las películas que te gusta ver cómo espectadora?

Siempre han de haber momentos para las películas que te saquen una sonrisa. Me encantan las películas que tienen un trasfondo psicológico detrás, pero también hay momentos en los que te apetece estar con una mantita en la cama o en el sofá con tu pareja, tu hermana, o tu madre y ver una película que te haga sonreír. Y esta película tan mágica lo consigue al cien por cien.

¿Todavía tienes una niña interior?

Quiero que mi niña interior nunca se pierda. En los momentos en los que me siento un poco perdida, vuelvo atrás y hablo con ella.

¿Cómo celebras la Navidad?

En mi casa siempre se ha celebrado el Caga Tió, porque es una tradición muy arraigada en Catalunya, donde he nacido y he crecido.  Y luego están los Reyes Magos.

¿Qué recuerdos tienes de ellos?

Cuando era pequeñita no dormía la noche de Reyes, y mi madre se las tenía que ingeniar. Tenía unas ganas horrorosas de que vinieran los Reyes porque siempre me dejaban una carta. Yo les enviaba la carta y luego ellos me la devolvían junto con los regalos, diciendo que me había portado muy bien y que gracias a eso recibía este regalo o este otro. A mí me hacía muy feliz.

Volviendo hacia atrás. ¿Cuándo fue el momento que te decidiste a ser actriz?

Cuando era pequeñita me ponía delante del espejo de la habitación de mi madre y me disfrazaba con las camisetas de mi padre. Actuar es algo que siempre he llevado dentro.

Estudiaste en Eòlia. ¿Qué aprendiste?

Es donde se sembraron las bases de lo que soy. Me llevo un recuerdo preciso. Me ayudó a entender lo que es actuar. Me enseñaron a ubicar las cosas y gracias a los cuatro años de carrera he podido hacer esta película.

¿Alguna lección especial que recuerdes?

El perder el miedo a equivocarme. A mí me dijeron «Equivócate, salta al vacío, no tengas miedo de hacer el ridículo porque allí se puede encontrar el gran aprendizaje y la mejora y el crecimiento”. Ahora ya no tengo miedo de saltar al vacío.  

¿Ser actriz lo llevas en tu vida cotidiana, observando a la gente?

Yo he estudiado psicología y me apasiona profundizar en las mentes de la gente. Puede suceder que me encuentre en un café, vea una pareja que esté hablando y me pongo a imaginar cómo su vida. Esto también es como una preparación para futuros personajes.

¿Y este carácter observador te ha inspirado para explicar alguna historia?

He escrito una obra de teatro “Showroom” y he escrito un cortometraje “Miel en los ojos» que espero poder ver en pantalla o teatro.

¿Qué tipo de historias te gusta explicar?

Me gusta mucho hablar desde mi propia experiencia, de cosas que haya vivido yo misma. Considero que el arte es sanador y es una herramienta para poder dejar ir distintos conflictos que hayamos podido tener en nuestra vida. Y al verlos reflejados o al verlos transformados en arte, de alguna manera aprendes a soltarlos y a perdonarte.

¿Un buen ejemplo es el cortometraje “Hada” candidata a los Premis Gaudí y que habla del sucidio?

Fue un trabajo de final de carrera de los alumnos que se graduaron después de mí en la escuela Eòlia. Creo que es muy importante hablar de las personas que toman la decisión de suicidarse. Tenemos mucho miedo y mucho tabú a hablar del suicidio y creo que es importante poder ponerle palabras, sobre todo escuchar a las personas de nuestro alrededor cuando necesitan que se las mire y se las oiga. Y yo creo que se podrían evitar muchos de estos conflictos si hablásemos las cosas tal y como son.

¿Es contraproducente este temor a hablar en la era de las redes sociales donde hay una comunicación constante?

Creo que las redes sociales son un punto muy negativo en este aspecto porque hacen que te cierres aún más en ti mismo y que tengas aún más miedo de expresar lo que te ocurre. Puede pasar que te veas que estás mal porque empiezas a ver alegría, euforia. Te sientes pequeño y además tienes miedo de ser juzgado. Y eso puede generar una sensación de fracaso.

¿Y tienes algún referente, alguien que admires mucho?

A mis padres porque con energías distintas me han enseñado muchas cosas.

¿Y alguna actriz que admires mucho?

De Hollywood Meryl Streep, a nivel europeo Isabelle Huppert y a nivel nacional sin duda alguna Carmen Machi “es una monstrua en la escena. Es increíble lo que hace?

Con los ojos cerrados ¿qué papel te gustaría hacer?

Si me lo hubieras preguntado hace cinco o diez años, te hubiera dicho el dramón. Pero en estos momentos algo alejado totalmente de mi, como por ejemplo el Joker de Joaquín Phoenix.

Para finalizar, acaba la frase: ser actriz es:

… desnudarte, mostrar tu vulnerabilidad.