Texto – Redacción. Fotografías – Hearst.
Lily Collins (Guildford, Reino Unido, 1989)protagoniza la portada de nuestro número de diciembre, el más mágico del año. Con un entusiasmo y una energía contagiosos, la actriz nos cuenta cómo la serie Emily in Paris ha dado un vuelco a su día a día. «Ha cambiado mi vida por muchas razones. Ser parte de un proyecto tan alegre y que hace sonreír a la gente es maravilloso, a la vez que una locura hacerlo durante cinco temporadas. He aprendido muchísimo metiéndome en la piel de Emily, ella crece, y yo lo hago a su lado. No quiero que la Lily actriz sea diferente a la Lily persona, soy una misma versión, pero en diferentes escenarios.», dice con esa mezcla de humor y ternura que la caracteriza.
A sus 36 años, la actriz, hija del legendario músico Phil Collins, irradia serenidad al hablar de su evolución. «Cuando era más joven me esforzaba en ser lo que yo entendía por perfecta, pero una vez que llegué al momento en el que empezó a suceder, abandoné esa postura… Algunas de las cosas más increíbles que ocurren en la vida se presentan cuando estás en tu etapa más caótica», afirma. Y reconoce que ahora la maternidad ha modificado su punto de vista y ha reafirmado su idea sobre la inexistencia de la perfección: «Tener un bebé cambia tus prioridades y tu perspectiva sobre tantos aspectos… Nunca le diría a mi hija que persiga la perfección, y es algo que continuamente me he recordado a mí misma. Lo importante para mí ya no es ser perfecta, sino estar presente para mi familia y para mi trabajo».
A Lily le gusta definirse como una mujer apasionada y en constante aprendizaje, pero también profundamente hogareña y fan de pasear en familia por los parques. Y aunque el brillo de Hollywood la acompaña, lo suyo confiesa que es la naturalidad. En su voz se aprecia una sincera gratitud y una certeza que la define: su voluntad de seguir creciendo sin dejar de creer en la magia. «Soy aventurera y curiosa, aunque mi vida personal es más tranquila que la laboral, me gusta estar en casa. Disfruto de esa calma al igual que de la locura de viajar. Lo importante es conseguir encontrar el equilibrio entre ambas facetas, saber llamar la atención, pero también pasar desapercibida. Ambas versiones de mí son entusiastas y busco darlo todo allá donde esté».
EXTRACTOS DE LA ENTREVISTA
- «Siempre me ha interesado la moda, porque siento que es una forma verdadera de expresión, de experimentar y crecer. Y profesionalmente me apasionan los diseñadores, ya que saben contar historias a través de la ropa; es todo un arte, un lenguaje».
- «Me gustaría que mi yo de 20 años supiera que el desorden te enseña lecciones maravillosas».
- «Es liberador expresarse y verbalizar aquello que nos preocupa para superarlo».
- «Soy como cualquier otra persona, albergo miedos, intento encontrar mi camino, tengo días buenos y malos y estoy super agradecida por lo que hago, pero soy muy consciente de que eso puede desaparecer».
- «Ser madre es un rol mágico, maravilloso y novedoso. Cada día es diferente. Estoy increíblemente agradecida por ello y perdidamente enamorada de mi hija».
Barnafotopress 
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