Silvia Sanabria: “Cuando le doy mi voz y mi alma a un personaje quiero que cobre una vida nueva”

Texto – Albert Roca. Fotografías– Santi Martínez Sancho-Rory Lewis-Pipo Fernández. Entrevista realizada en Singular. Calle Carretas 14.

La actriz colombiana Silvia Sanabria es la vitalidad personificada, que le pone su voz y su alma a cada interpreta que le llega. Muy recordada en España por su personaje de Nacha en Servir y proteger, pronto la veremos en la coproducción Flukten Fran Bolivia, basada en hechos reales.

Eres una persona muy sensible ¿verdad?

Vivo muy intensamente todo. Creo que la vida es un poco fugaz. Tuve un abuelo que siempre vivía todo con mucha verdad. Siempre me decía, “que la vida son dos segundos y si uno no aprovecha esos momentos después viene el arrepentimiento, y qué feo es arrepentirse”.

¿Te acuerdas mucho de él?

Mi abuelo dejó un legado muy bonito. Cuando oigo a la gente hablar de él, es que todo el mundo siempre está acordándose del señor Ciro, como una persona alegre, generosa, que daba mucho, que compartía y que nunca se quejaba de nada. Mi abuela Ina también era muy generosa y enérgica.

¿Eres muy disciplinada?

Sí y además muy cabezota para lo bueno y para lo malo.  Utilizo esa parte también para cuando quiero hacer algo pues soy muy perfeccionista. Y considero que no es tan agradable porque no acabo de estar satisfecha con lo que he conseguido, ya que pienso que podría haberlo hecho mejor. Voy trabajando en lograr ser más flexible conmigo misma y los demás.

Lillo management dice que cada proyecto en el que participas se llena de vida

Lillo es muy cariñosa. Estoy muy agradecida que lo vea así. Cuando le doy mi voz y mi alma a un personaje quiero que cobre una vida nueva. La idea es que ese personaje sea real y llegue a algunas personas. Todos somos muy distintos. Hay gente a quien el personaje le toque el alma positivamente y otros que lo rechacen o critiquen. Y eso no es malo. En la variedad todo es posible. Eso es el arte, un mundo multicolor. Para unos es blanco y para otros es negro.

Hablando de dar vida a un personaje, en Servir y proteger interpretaste un personaje muy entrañable, Nacha

Tuvo muchos colores y con luces y sombras. Pude jugar mucho con ella  y descubrir que necesitaba en cada guion. Desde el primer casting vi que era un personaje lleno de humanidad y empatía.

¿Te gusta que tus personajes sean muy reconocibles?

Si me das ahora un guion y lo leo, y me dices, “tú vas a ser Daniela”, cuando esté dándote las líneas en escena necesito sentir que eso está fluyendo de una manera orgánica. Hasta que no lo sienta ahí adentro, no puedo hacer el personaje. Igualmente podría, pero no seria lo mismo.

¿Siempre tienes una maleta a punto?

Hay cuatro o cinco y siempre una maleta pequeñita que va conmigo a todos lados, que son algunos de mis libros que voy adquiriendo.  Siempre hay una maleta que se llena de recuerdos de cosas que he comprado, algunas de ellas en el camino de mi nuevo destino. Y es que en mi caso, siempre estoy preparada para viajar a nuevos destinos y tener nuevas aventuras.

Recientemente has rodado Flukten fran Bolivia

Sí, ha sido un gran proyecto, un equipo que nunca olvidaré y la historia está basada además en hechos reales. Imagínate a tres jóvenes noruegas que son interceptadas en Bolivia con muchos kilos de droga sin saberlo y sus vidas cambian para siempre. Solo os invito a ver los seis episodios que se estrenarán próximamente. Mi personaje es la Coronel Victoria.

En tu trayectoria ha sido importante México

México es casi como otra casa para mí. El año que viene también ruedo una película, de la que ahora poco puedo hablar, pero así es, México es muy especial, un país rico culturalmente y con mucho por explorar.

También has hecho publicidad

Me gusta mucho y me permite viajar. Conozco siempre equipos increíbles y puedes ser dirigida por directores muy buenos.

¿Cuál sería tu gran proyecto que harías con los ojos cerrados?

Cualquier proyecto que tenga que ver con una mujer fuerte que deje un mensaje, un legado. De hecho hice una película independiente que se llamaba Victoria 2030 y que no se vio en cines porque era una película cultural educativa. El personaje que interpreté era el de Marta,, una mujer que como muchas mujeres, niños, en fin, personas colombianas caen en la guerrilla por obligación y su único sueño es lograr salir de ahí

Fue emocionante interpretar a Marta porque ella sí logró sobrevivir después de morirse de hambre, ser abusada, maltratada, logró salir de la guerrilla y llegó a España. Hoy en día esa mujer vive aquí, trabaja cuidando a gente mayor y ha logrado rehacer su vida. Me siento feliz de haber dado voz a la vida de Marta en esta película.

¿Y otros personajes que te seduciría hacer?

El de una jueza, una abogada, o una mujer de la calle que por razones de la vida se quedó sin techo y logra un día tocar una puerta y tiene una oportunidad para avanzar. Todo lo que es acción y justicia, este tipo de proyectos me gustan.

Otro aspecto que tienes es tu sensibilidad social

Sí, claro. Si no hacemos nada por nuestra sociedad y no usamos nuestra voz para defender los derechos y protestar por las injusticias o apoyar las buenas causas, entonces, ¿para qué sirve tener voz?

En estos días leí la horrible noticia sobre Sandra Peña, y claro que tenemos que unirnos y reclamar atención para los jóvenes, para que, por favor, paren el bullying y no decidan acabar con sus vidas por miedo a vivir. No es justo.

También me gusta apoyar a fundaciones como Cris contra el cáncer, que apoyan la investigación y les da voz y apoyo a las personas que padecen esta enfermedad. Llegué a unirme y a dar apoyo y voz a esta fundación porque mi gran amiga y otros seres cercanos a mí viven esta enfermedad. Y yo me pregunto, si mañana fuera yo la que estuviera afectada, creo que sí, a Silvia le gustaría tener una solución más rápida. Por eso tenemos que intentar apoyar campañas como la de Dame Cinco Más de la Fundación de Cris Contra el Cáncer, porque todos, si nos fuéramos a morir, quisiéramos tener cinco años más de vida.

Creo que el arte y la humanidad van de la mano.