Texto – Albert Roca. Fotografías– Santi Martínez Sancho. Entrevista realizada en Singular. Calle Carretas 14.
La vimos en Cuatro Estrellas y próximamente en la película “Tiro de tres” de Miguel Córcoles con la productora Filmestudioab está finalizando su rodaje. Alba Fontecha es una actriz versátil y comprometida y que lleva el apartado de interpretación de la Fundación Psico Ballet Maite León.
¿En cada personaje descubres cosas nuevas?
Te metes en una vida que, a lo mejor, no te han tocado vivir o experimentar y descubres cosas que a lo mejor no sabías de ti o de tu alrededor.
¿Cuál ha sido el papel que más se te ha acercado?
Estamos terminando el rodaje de la película Tiro de tres, de Miguel Córcoles. Cuando empecé con este proyecto, me parecía que mi personaje estaba en las antípodas mías. Veía que no teníamos nada que
ver. Y, sin embargo, ahora que estoy terminando la película y que he hecho casi todo el viaje,
creo que es el papel que más se acerca a mí misma.
Te vimos en Cuatro estrellas. ¿Qué recuerdos tienes?
Fue de los mejores rodajes que he tenido en mi vida y hablando con compañeros y compañeras, todos piensan lo mismo. Te hacía sentir cómoda desde el primer segundo. Llegas a la prueba del vestuario y te sentías como en casa y eso no era fácil.
¿Cómo era tu personaje de Rebeca?
Siempre hay mucho de mí en los personajes. Pero en este caso Rebeca venía de una clase social que no
era mía. Pero al final todo partía de mí y tenía mucho que ver conmigo.
Un aspecto importante para ti es la danza inclusiva. ¿Puede ser muy efectiva?
Nosotras en la fundación Psico Ballet Maite León buscamos, a través de la danza, incluir todo tipo de cuerpos, de energías, no solo incluir la diferencia sino profundizar en ella, crear desde ahí y enriquecer
así las piezas.
¿Cuándo nace la fundación?
Ya lleva 40 años y yo llevo la parte de la interpretación. La fundó Maite León que era bailarina, tuvo una
hija que sufrió anoxia cerebral durante el parto y le produjo una lesión cerebral. Comenzó a trabajar con ella desde la danza y descubrió la belleza de sus movimientos. Así empezó a trabajar, a través del arte, con alumnxs con dificultades de aprendizaje y fue el gérmen de lo que hoy es la Fundación Psicoballet que dirige
su hija Gabriela.
¿Qué piensas sobre la discapacidad y la inclusión?
Creo que no hemos entendido del todo que significa la inclusión. Parece que lo que intentamos es obligar a las personas a que se comporten de una manera que entendemos que es la forma correcta de hacer las cosas. Pero creo que la verdadera inclusión esta en que se respeta la diversidad y se incluya, así como es,
en la vida social, laboral, cultural…
Realmente seremos inclusivos cuando dejemos de hablar de espectáculos con discapacitados, y espectáculos sin discapacidad. Yo iré a ver un espectáculo y punto, que tenga calidad, y en el que puede haber o no una persona discapacitada. Me da igual que sea cómica, drama… pero que tenga calidad y que me pueda remover.
¿Y cómo llegaste a la fundación?
Llegué a través de una profesora mía y que estaba trabajando allí y que se había dado de baja. Les conocía por un espectáculo que hicieron en el Teatro Español y me encantó.
¿Cómo se estructura la fundación?
Dentro de la fundación tenemos la Compañía de Danza Internacional Inclusiva, el programa artístico de formación continua IOCO y Pez en el Desierto, que es la agencia de representación de actores con discapacidad intelectual. Yo les doy clases de interpretación y cuando sale un casting los preparo. Por ejemplo, hace poco estuve en el rodaje de la serie Cicatriz, donde había uno de mis alumnos y trabajé con él de coach.
¿Qué personaje que no hayas hecho te gustaría interpretar?
Me gustaría muchísimo hacer algo de acción.
¿Y de época?
Claro qué si ya que me gusta mucho la historia.
Barnafotopress 
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