David Bisbal, portada de Esquire

Texto – Redacción-Hearst. Fotografias – Hearst.

El protagonista del número de noviembre de Esquire hace un retrato fotográfico y periodístico del artista que entró en nuestras vidas en 2001 a través de la pantalla de la televisión con una frescura y verdad inusuales, y se desató un fenómeno social y de masas inédito hasta el momento.

Con una generosidad y una naturalidad sin límites, Bisbal se abre en una entrevista muy sincera y personal y reconoce encontrarse en su mejor momento profesional y personal, en gran parte gracias a que ha encontrado la tranquilidad gracias a su familia: “Ahora tengo una familia por primera vez y eso te da una fuerza y una seguridad enormes. Y cuando eso es tan fuerte, solo quieres cuidarlos sobre todas las cosas”, confiesa.

“Antes cantaba con la intranquilidad de no ser plenamente feliz en lo personal. Ahora tengo por primera vez una familia que me da fuerza y seguridad»

El artista repasa sus inicios, desde que recorría España con su orquesta, hasta que la vida le cambió al presentarse a Operación Triunfo: “Armarme de valentía, quitarme esas cadenas de timidez para probar suerte y ver si luchando fuerte podía conseguir mis sueños. Esa ha sido la decisión más acertada de mi carrera”, se sincera. Precisamente luchar y trabajar sin parar han sido algunas de las razones de su éxito, tal y como reconoce a Esquire: “En los primeros diez años estaba continuamente viajando; veo imágenes mías que recuerdo de dónde son. Con el paso del tiempo, mi trabajo ha aumentado, pero he desarrollado la capacidad de saber organizarlo. Todo apuntado y bien organizado”, dice.

El futuro no le inquieta prefiere centrarse en su presente y disfrutar de él: “Sinceramente, no me gustaría cantar por necesidad, sino porque realmente me gusta. Me siento en el mejor momento, de repertorio, vocalmente hablando, y no me preocupa el futuro. Pero lo que sí es cierto, es que en el momento que vea que no puedo defender al cien por cien mis canciones tendré que decirlo. No quiero que otros me lo tengan que decir”.

Solo hay una cosa que empaña este gran momento que vive el artista y es la enfermedad de su padre que le hace enfrentarse a la dureza de la vida tal y como el mismo reconoce: “La vida te da momentos maravillosos y de pronto te hace poner los pies en el suelo y vivir situaciones para las que no estás preparado. Mi padre era muy especial, era un superhéroe. Y era muy bromista, todo el mundo le quería. Y digo era, porque ya no está presente como antes”.

EXTRACTOS DE LA ENTREVISTA:

• “Tengo mil reuniones conmigo mismo. Aislarse por completo con uno mismo es una maravilla. También me sucede cuando canto”.

• «A veces pienso que me lo habría pasado genial en la época de Raphael, Camilo Sesto, Julio Iglesias o José Luis Perales. Me habría encantado ser artista en aquellos tiempos».

• «Tengo una relación muy especial con Rosa, porque la conozco desde antes de empezar OT. Rosa es una persona que no ha cambiado nunca. Ella es ella y lo será siempre».

• «De repente llega una persona madura, que tiene una manera de pensar idéntica a la tuya, y entonces, encuentras la tranquilidad».

• “Rosanna y yo hablamos muchísimo sobre la educación de nuestros hijos. Estamos muy contentos con la que nos han dado nuestros padres, hemos tenido familias trabajadoras con valores extraordinarios, pero pensamos que la versión de nuestros padres se puede mejorar y lo vamos a hacer”.