Raquel Sánchez Silva: “La pasión es la gasolina de la vida”

Texto – Albert Roca. Fotos – Albert Roca-Redacción-Albert Roca.

La popular presentadora Raquel Sánchez Silva se estrena como novelista de ficción con el libro “Mañana, a las seis” –Editorial Planeta- que tiene como protagonista a Lucía, una mujer casada en momentos de crisis que decide renunciar a todas las comodidades para vivir al límite de sus pasiones. Un libro con muchas miradas, sobre las decisiones de la vida, con personajes paralelos entrañables y un mensaje positivo presente desde la primera línea hasta la última.

3 años después de nuestro anterior encuentro, en Sant Jordi –donde firmó su libro “Cambio príncipe por lobo feroz- vemos a una Raquel muy contenta, ya que sin haber llegado a la semana su libro ya cuenta con una segunda edición » No me lo esperaba, al menos yo».

En el inicio del libro hay una escena sexual que Raquel considera esencial en la trama “el sexo muestra en toda la plenitud la soledad en la que se encuentra el personaje de Lucía. Vive una sensación tan tremenda en la que todos de un modo u otro nos podemos sentir identificados”

En el libro el personaje toma una determinación para cambiar su vida “no hay nada que me produzca más infelicidad cuando veo personas infelices, atrapadas en una situación, en algunos casos con extrema pobreza. Lo más terrible es cuando les gustaria cambiar pero no pueden hacerlo. Lo que más nos puede llegar a agotar no es tener infelicidad sinó no poder cambiarla”.

Y la pasión que vive el personaje de Lucia “la pasión es la gasolina de la vida. La pasión por una madre, por un amor, por la vida en un sentido absoluto. Es “la chispita”, el motor que lo mueve todo. El personaje de Lucia tiene muy claro que quiere vivir una pasión aunque con ello se meta en unos cuantos lios”.

Sobre esos lios, Raquel se implicó con su personaje e incluso la regañaba “habían momentos que la quería matar por lo que estaba haciendo, pero igualmente la acabas queriendo. Pero mira, va aprendiendo, sufre, lo ha intentado… y eso es importante”.

En el libro hay muchos diálogos, que han supuesto “un reto para mí y es donde más he disfrutado. Como periodista estoy acostumbrada a hablar con la gente pero en el terreno de ficción es diferente, ya que hay que mostrar mucha verdad, que los personajes no estuvieran vacios”.

Y la bondad y la maldad, que también surge en diferentes momentos de la novela “Quiero pensar que la maldad tiene unos límites pero la bondad no,. La maldad está reservada para unos pocos, pero tiene una gran incidencia. En muchos momentos nos cuesta mucho ver lo bueno que hay en las cosas. Te puedo explicar un ejemplo, en la red social hay 6 personas que te explican cosas bonitas, y que te quieren, pero de pronto hay una que te habla mal, y te incomoda y a partir de entonces no te la quitas de la cabeza. Piensas una y otra vez los motivos que le llevan a hablar mal de tí, y te olvidas de la gente que te quiere, que te desean lo mejor. Y no hablo en general ya que puedo ser la primera en hacerlo, y no es justo”.

Para Raquel un aspecto fundamental en la vida “es tener ilusión y no perderla nunca”. Una ilusión que se manifesta a través del título del libro “Mañana, a las seis”… es una cita, que me encanta. Estar viviendo todo este dia para que llegue, mañana, a las seis. Es tan bonito, no estar pendiente del presente sinó también pensar en lo que va a suceder… mañana”.

En la novela hay varios personajes paralelos “que tienen una incidencia importante. Y sabes? habia momentos en que los personajes incluso cobraban cierta vida. Yo tenia pensado unas situaciones pero esa dinámica de los personajes me llevaba a hacer otras”. Raquel continuá comentando “estos personajes de la novela los tenía en la mente desde hace años, reflejando diferentes cosas, y la dificultad era encajarlos en la historia de Lucia, y encajaron, como también todo en la vida”.

Uno de los personajes es un gato “como el que tengo en casa, aunque es más docil. Simón, el gato de la novela es un señor gato, y no está dentro de la novela sinó más próximo a mí, al lector, es un espectador externo de todo lo que está ocurriendo”.

Le preguntamos sobre su gran capacidad de participar en muchos proyectos y programas «algunos salieron bien pero otros no. Pero no pasa nada. No hay nada seguro ni absoluto, como caerle bien a todo el mundo”.

Respecto a la hora del título del libro, las 6, es la preferida de la presentadora y escritora? «en verano las 6 es una buena hora pero mi momento preferido es el despertar, por todo lo que conlleva. Es un momento muy especial».

Finalizamos la entrevista, muy contentos de ver una Raquel radiante, que nos recuerda un detalle final: “sabes cuando terminé el libro? El dia de Sant Jordi…., fíjate, este dia tan especial”, del que le encantaria vivir de nuevo, en Barcelona, para recibir el baño de multitudes que recibió hace 3 años “y eso que había publicado el libro 2 años atrás, por lo menos. Fue muy bonito”.